El tridente portugués & Amistad con el diablo

sssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
sssssssssssss
sssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
sssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
Por fin llegó el esperado día.
El Marqués de Villaviciosa me había hablado mucho de laexistencía de una pared desde cuya cumbre podia verse el mar. La noche anterior nos reunimos con varios expertos escaladores de las tierrras charras en el var ojaras de la capital salmantina. Allí ultimamos los detalles de la expedición, se habló principalmente de la cantidad de pintura que deberiamos utilizar para pintar, el mal llamado naranjo de bulnes, de otro color ya que así seriamos los primeros en alcanzar la cima cuando el naranjo ya no fuera naranja.
Las reunión se alargó hasta altas horas de la noche. La expedión ya había comenzado.
Recogí al famoso geolgo y expedicionario Mon Shulz y partimos para la Tierra Prometia, La Asturiania.
recogimos en Arenas de Cabrales al lugareño que nos habría de acompañar y guiar para la conquista del Picu. No habiamos escatimado en gastos y contratamos a uno de los mejores, Rul el Cainejo que ha cambio de 4 cartones de tabaco y 4 días de fiesta estuvo encantado de acompañarnos.Despues de una cena en Arenas para decidir la vía y perder un poco más de tiempo partimos para el picu con nuestras pesadaS mochilas aproximadamente a las 11.00 de la noche .
Rapidamente conseguimos perdernos y descubrimos que el Cainejo ,y utilizaré el lenguaje de los lugareños, no tenía ni puta idea de dónde estabamos.ssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssDespués de más de una hora de pérdida logramos encontrar el camino
sLa ascensión fué realmente dura, terrible y uno a uno fuimos atrevesando diversas pájaras. Yo en primer lugar después Mon Shulz y finalmente el Cainejo al cual estuvimos a punto de tener que abandonar medio muerto por el camino.Después de una agonica subida alcanzamos la base del naranjo a las 3,30 o más.
amaneció con la imponente vista del picu, y la no menos impresionante del Cainejo vivo y despierto a las 7,30 para tener opción a escalar por aquella cara del picu que se veia.afortunadamente Mon Shulz y yo nos miramos tratando disuadir al Cainejo de ascender por ese lado de la pared. Además el naranjo no era naranja y ya no tendriamos que pintarlo.Dos horas más tarde nos levantamos despues de que el CAinejo nos sirviera el desayuno en el saco y decidimos escalar por otra cara
Y de nuevo a andar
desde la mañana el Cainejo se encontraba en plena forma y todo estaba a favorlos patrocinadores de" la sociedad de surf de los locos" podian estar de enhorabuena, la expedición se acercaba al objetivo con los animos en alzaEn la base de la pared coincidimos con una expedición zamorana con la que compartiriamos parte de la ascensión y de la sabiduría del Cainejo.
La ascensión se realizó con el Cainejo de primero de cuerda en toda ocasión y con los clientes a continuación.

la ascensión era rápida y bella aunque arriesgada para el Cainejo que no encontraba apenas sitios dónde emplazar los tacos de madera y clavijas. Pese a que escalaba con gran gracilidad, llegó a reconocer que en ocasiones le temblaba la patuca.

Cuando nos encontrabamos disfrutando de la majestuasidad del paisaje y del silencio y belleza del lugar apareció repentinamente un tal Adrados que escalaba directamente hacía nosotros desde otra vía.

La intención del Adrados era pedir los croquis de Teverga al Cainejo ya que en otra ocasión no se los había dado. El Cainejo ni corto ni perezoso al ver al Adrados salió con gran agilidad de la reunión camino de la cumbre pués no pensaba darle los croquis.

Fueron los momentos de más tensión de la ascensión ya que el CAinejo en su empeño por alejarse del Adrados nos obligó a Mon Shulz y a mi mismo a escalar en el llamado ensamble

Ya no quedaba nada y la expedición alcanzo rápidamente la cima. Y en efecto desde allí arriba se veía el mar. Tomamos el purito del agradecimiento y pa bajo.

Bajada de la pared por su cara sur, descenso hacía el refugio, marrón que acecha y decimos bajar después de tratar de comernos todo lo que habíamos traido. Como no denoche. A la 1.30 de la noche estamos abajo reventados y felices y contentos.........................luego vendría el momento de cumplir con el Cainejo y las noches de fiestas fueron también muy duras.

Las semanas siguientes nos dedicamos a explorar las playas que habiamos visto desde la cima y surcamos las olas de ese mar desde el que se ve el Picu Urriello.